CONSUMER DATA ANALYSIS
¿2017, O EL RETORNO DEL
OSCURANTISMO?
Por Camilo Herrera Mora
Presidente de RADDAR Consumer
Knowledge Group
Especial para Revista P&M
Si 2016 fue el año de la incertidumbre, 2017 será el año
del oscurantismo. Por años el mundo persiguió y defendió las causas liberales,
la apertura, la igualdad, los derechos humanos e incluso la diferencia, pero
esto tiene un tiempo, y toda fuerza tiene una reacción, y el mundo ha mostrado
en las urnas y en los mercados, que clama por volver al pasado, en la presencia
de una trampa mortal.
He aprendido que el consumidor se forma desde que nace
hasta más o menos los 20 años, y de ahí en adelante lo que hace es adaptarse lo
mejor posible al cambio, pero no hace transformaciones profundas de sus
creencias o concepciones básicas, pero si puede cambiar sus comportamientos de
consumo, siempre y cuando no entre en choque con los principios formados en su
infancia y adolescencia. Obviamente me refiero a lo que la gente realmente cree
y considera correcto o posible, y no a lo que le toca hacer, porque en muchos
casos las personas hacen cosas que son lo correcto, pero por dentro piensan
diferente.
Así, nos formamos como consumidores de cero a 20 años, y
la época en que nos formamos es el lio del asunto. Todos, a los 20 años
queremos cambiar el mundo porque creemos que muchas cosas pueden ser mejor y
estamos dispuestos a hacerlo. Al Gore, en un TED, dice que cuando el hombre
llegó a la luna, el grito de emoción del equipo de Houston fue enorme, porque
cumplieron la misión que se le encomendó 8 años atrás pese a que parecía
imposible, y lo más relevante, es que la mayoría de esos ingenieros tenían 25
años, y oyeron el reto de Kennedy cuando tenían sólo 18 años.
Woodstock no fue diferente a Houston, ni a muchos otros
eventos, donde los jóvenes han clamado por cambiar el mundo en que vivían, pero
en el fondo hay cosas que nunca cambiarían de sí mismos y que cuidarían en su
mundo ideal. Esos jóvenes hoy tienen más de 65 años, y vieron todos los cambios
del mundo, y sin bien aceptan la diversidad, no están comprometidos con ella.
Si la diversidad llega a su casa, tienen serios problemas; si su hijos es gay,
consume drogas o apoya pensamientos políticos diferentes, se dará un choque de
edades y generaciones muy fuerte, donde se verá que ese joven revolucionario no
quiere que todo cambie y que defenderá a ultranza cosas que cree que son
fundamentales.
Esta generación lucha por las libertades pero tienen
serios problemas con que estas lleguen a su casa. Las libertades son para los
demás y las respetan, pero sufren cuando estas llegan cerca, por eso perdió el
Brexit, el acuerdo de paz y ganó Trump, porque cuando hay muchos cambios, las
personas se sienten asustadas por la refutación de sus verdades y por ende de
su esencia propia, y si tienen la oportunidad de defender sus creencias lo
harán.
Hay que comprender que si el gobierno dice que ser gay
está bien y que pueden casarse y tener hijos, es decirle a los que no están de
acuerdo, que están equivocados, y eso causa un choque cultural muy fuerte, que
en estos tiempos se dio en un escenario inesperado: son más los viejos que los
jóvenes y eso frenó el cambio.
El cambio está en una trampa mortal. El cambio se daba
porque los jóvenes eran mayoría y podían imponer sus ideas, pero ahora las
mayorías son mayores y evitaran que se dé el cambio, y sólo se dará con la
muerte de las generaciones superiores, que cada vez son más longevas. Así, el
mundo perdió su velocidad, y lentamente cae en el abismo del oscurantismo, del
pasado, de lo conocido, de evitar el riesgo, con el enorme problema que cada
vez estamos más conectados y por ende somos más controlados.
Esto redefinirá el mercadeo, porque habrá un punto que
habrá más Grises que Verdes, e incluso más Verdes que Amarillos (donde los
grises son los X, verdes los Millenials y amarillos los centenials), y cuando
hay más viejos que jóvenes, las sociedades se envejecen como las marcas, y el
mercadeo innovador y disruptivo del que tanto hablamos, deberá ser más vintage
que contemporáneo, y pensar más en lo geriátrico que en lo juvenil, y eso
cambiará todo el juego.
Bienvenidos a los nuevos juegos del mercadeo, en un
mercado de muchas personas mayores y pocos jóvenes deseosos del cambio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario